¿Existen las casualidades? No sabemos responder a esta pregunta pero si sabemos que, casualidad o no, estamos muy agradecidos de haberte conocido.
Llegaste a nosotros de la mano de Albert, un valiente "Xipirón", y su mamá Pilar, familia cofundadora de nuestro proyecto y que forma parte de nuestra junta directiva. Tú ya habías transformado tu cáncer en motivación y tenías un gran proyecto entre manos: Del Hospital a la Catedral.
Con tu esfuerzo querías ayudar a la investigación del cáncer infantil, concretamente en un proyecto de investigación del VHIR sobre el Ependimoma, cáncer cerebral que padece Albert.
Así entraron las Candelas en tu campaña y así comenzó nuestra relación.
Sin duda has sido un ejemplo de fuerza para todos y sabemos que tu decisión de transformar la dura batalla personal en solidaridad para nuestros niños, nos ha unido para siempre. Tu corazón estaba lleno de esperanza como todo buen candelero y al igual que nuestros "Xipirons", no te rendiste jamás.
Hoy, 16 de Enero de 2020, nos despedimos de ti con el deseo de que nuestros ángeles te acompañen en este nuevo viaje y con la promesa de que nosotros seguiremos apoyando el proyecto de investigación que tu pusiste en nuestro camino.
Hoy leyendo tus palabras, creemos un poco menos en las casualidades.
Gracias Xavi.
Te echaremos de menos.